ABUNDANCIA. Una palabra pero infinidad de significados.
Cada uno de nosotros tenemos una definición concreta y singular de la palabra ABUNDANCIA. Para la mayoría de las personas la ABUNDANCIA se relaciona casi únicamente con lo material (dinero, posesiones, etc…). Sin embargo, la ABUNDANCIA abarca muchas más facetas de la vida que la económica.
Podemos ser ABUNDANTES en amor, en amistades, en salud, en alegría, en vitalidad….
Cuando nos paramos a mirar nuestra Vida, cuando revisamos todo aquello que hemos vivido y lo que estamos experimentando en este momento es cuando la ABUNDANCIA se manifiesta plenamente ante nosotros.
Aunque tu situación económica no haya sido o sea la más holgada y próspera, todos y cada uno de nosotros experimentamos la ABUNDANCIA de mil formas y maneras.
Escuchar el murmullo del agua o la risa de mi hija, disfrutar con una melodía que meza mi corazón, el placer de un paseo en la naturaleza, el abrazo de alguien que me ama, una mirada cómplice… todo eso es ABUNDANCIA.
Y a menudo no valoramos cada uno de esos instantes. Creemos que esas posibilidades siempre van a estar a nuestra disposición y la realidad es que no es así. La risa de mi hija irá cambiando con su crecimiento, el murmullo del agua no siempre será igual, mi estado de ánimo ante la melodía que mece mi corazón no será el mismo …
Cada instante que vivimos es único e irrepetible. Y en cada uno de ellos la ABUNDANCIA está presente. Porque el mero hecho de existir nos conecta con la ABUNDANCIA.
Somos nosotros quienes nos desconectamos de ella sintiéndonos no merecedores de todo lo mejor, limitando al Universo en su forma de manifestar la ABUNDANCIA (le decimos necesito esto o aquello en lugar de pedir que llegue a nosotros lo que nos vaya a ayudar a lograr la felicidad), enfocándonos en lo que no tenemos y no somos en lugar de agradecer lo que sí nos rodea y somos capaces de manifestar.
A veces los desafíos de la Vida nos impiden ver la ABUNDANCIA que aún nos sostiene incluso en esas situaciones tan intensas. Cuando eso ocurra, cierra los ojos, respira profundamente llevando tu atención al corazón y sonríe. Este simple gesto te ayudará a reconectar con la ABUNDANCIA. Y cuando conectamos con ella toda nuestra realidad brilla y fluye de nuevo.
Te animas a intentarlo?
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