RECONEXION CON LA TIERRA, EL SOL Y LA LUNA

por | Abr 24, 2018 | Meditación | 0 Comentarios

Imagina que estás en plena naturaleza, en un lugar en el que te sientas en total conexión con La Madre Tierra. Puede ser una playa, un campo de amapolas, a la orilla de un río o dentro de un bosque de álamos.

Conecta con todo lo que te rodea, inspira el aroma de ese lugar, permite que recorra todo tu cuerpo, que lo acaricie, que lo llene con su energía. Mira a tu alrededor, permite que todos los colores que ves entren en ti.

Ahora siéntate. Imagina, siente o visualiza que desde el centro de tu pecho, ahí donde se encuentra tu corazón energético, empieza a descender un hilo de luz dorada que va recorriendo tu columna hacia abajo y que sale de tu cuerpo atravesando la tierra, las rocas o la arena del lugar donde estás sentada y siente cómo esa luz dorada sigue yendo hacia abajo a través de las diferentes capas de nuestra Madre Tierra hasta llegar al centro, al centro de la Madre Tierra, al corazón de la Madre Naturaleza.

Permite que esa conexión invada tu ser. Ahora estás conectado a esa gran madre, que te cuida y te protege, que te provee de abundancia. A través de esa conexión, desde el corazón de la Madre Tierra llega a ti todo aquello que necesites para hacer realidad tus sueños: amor, valentía, decisión, fuerza, voluntad, transformación, abundancia, poder, sabiduría y cualquier otro atributo que necesites en este momento para manifestar en tu realidad aquello que tanto deseas, siempre que esté en consonancia con tu bien mayor.

Y ahora que estás en esa conexión profunda e íntima con la Madre Naturaleza, con la Madre Tierra, siente, imagina o visualiza que desde ese centro del pecho desde donde estás conectada a la Madre Tierra emerge de nuevo una luz dorada que asciende a través de tu garganta, del centro de tu cabeza y que sale por tu coronilla y va hacia arriba hasta conectarse con El Sol. Siente cómo ahora estás conectada al astro que nos calienta y que nos ilumina, siente su energía masculina fluyendo hacia a ti a través de esa luz dorada, de la misma forma que la energía femenina asciende desde la Madre Tierra. La energía masculina y la energía femenina ahora se funden en tu corazón energético, en el centro de tu pecho y se expanden por todo tu ser, reconectando todo aquello que está aislado, limpiando todo aquello que debe ser sanado, inundándote de amor y de sabiduría, de fuerza y confianza.

Por último, imagina de nuevo cómo desde tu corazón, desde ese centro de tu pecho asciende a través de tu garganta y de tu cabeza un haz de luz plateada que también sale por tu coronilla y que va directamente a conectarse con la luna. Desde allí ella te ofrece su energía femenina, te ofrece su amor, su sabiduría. Te ofrece esa energía que te moverá, que te impulsará a transformarte, a ser consciente de tus ciclos, de tus idas y venidas, de las posibilidades de cambio y transformación.

Siente cómo esas tres energías te transforman, siente cómo desde ahí, desde esa unión eres capaz de todo. Permanece el tiempo que quieras en conexión con estas tres conciencias divinas que tanto amor sienten por ti, y cuando lo desees regresa al aquí y ahora.

0 comentarios

Enviar un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

Entradas recientes

Categorías

SUSCRÍBETE A NUESTRO BLOG

SÍGUENOS EN YOUTUBE

Pin It on Pinterest